Las válvulas maestras son un valioso añadido a un sistema de riego. Pero, ¿qué son? ¿Cómo funcionan? ¿Y qué funciones son esenciales? Una válvula maestra (MV) es una electroválvula conectada a un programador de aspersores o al relé de bomba. Su función principal es controlar el caudal de agua presurizada a una línea de riego. Para adaptarse a las necesidades de aplicaciones residenciales y comerciales exigentes, las válvulas maestras están fabricadas con diversos materiales, incluyendo nylon relleno de vidrio, plástico o metal. Normalmente se disponen en una configuración de globo o de ángulo. Es importante indicar que las válvulas antisifón nunca deben usarse como válvulas maestras. La aplicación de una presión constante en ambos lados de la válvula, tal como es necesario para una válvula maestra, podría hacerla fallar o estallar.

Tamaños y funciones de la válvula

Las válvulas maestras varían en tamaño de 1 a 8" (25 a 200 mm). Se colocan entre el suministro de agua y el sistema de riego, con frecuencia llamado acometida de agua. En sistemas grandes, utilice una válvula maestra de apertura y cierre lentos para evitar aumentos repentinos de agua. Para garantizar un rendimiento fiable y a largo plazo, opte por funciones adicionales como regulación de presión, una mayor tolerancia a los residuos y una tolerancia al agua reciclada. Las válvulas maestras se suelen acoplar con un sensor de caudal. Esta valiosa herramienta puede detectar averías en el sistema, lo que minimiza la pérdida de agua y daños a la propiedad. El sensor de caudal se ofrece en el tamaño correspondiente para los caudales esperados, y puede ser de tamaño diferente al de la línea principal o válvula maestra. El programador interpreta la señal del sensor de caudal y la utiliza para detectar las condiciones de caudal, como desbordamiento o caudal bajo. Dependiendo del tipo de programador, el sistema puede detener el riego, realizar diagnósticos y enviar una alerta al administrador de riego. No todos los programadores de riego son compatibles con una válvula maestra o un sensor de caudal. Los que sí lo son, es posible que funcionen solo con modelos específicos. Consulte con el fabricante para solicitar recomendaciones.

Tipo de válvula: Normalmente abierta

Una válvula maestra normalmente abierta (NOMV) está en una posición abierta constante. Esto permite que la línea principal se mantenga continuamente presurizada, independientemente del uso aguas abajo. Se cierra solo cuando una señal procedente del programador activa el solenoide y le indica a la válvula que debe cerrarse. Una NOMV no se energiza durante el riego regular y podría pegarse. Para garantizar que funcione normalmente cuando sea necesario, debe examinarse periódicamente para evitar que los componentes móviles se queden pegados en la posición abierta. Un beneficio de una NOMV es que permite el acceso al agua presurizada en cualquier momento para otros usos, por ejemplo, llaves para manguera, acopladores rápidos y rellenos de estanques. Sin embargo, este tipo de uso mixto puede dificultarse si también se utiliza un sensor de caudal para realizar un seguimiento y administrar el caudal. Una desventaja de una NOMV es la falta de protección para la fuente de agua si la energía falla. La línea principal de riego también estará expuesta a cualquier aumento repentino de agua en la línea de suministro de agua.

Tipo de válvula: Normalmente cerrada

Una válvula maestra normalmente cerrada (NCMV) mantiene aislada la línea principal hasta que el programador envía una señal que activa el solenoide y abre la válvula. Se activa cuando se abre la primera válvula de control remoto, y permanece en esa posición hasta que la última válvula del ciclo finaliza su tiempo de riego. De esta manera, la línea principal se presuriza solo cuando el sistema está regando.

Dado que los sistemas con frecuencia operan durante la noche, las fugas pequeñas que podrían ser visibles durante el día podrían pasar desapercibidas. Afortunadamente, un sensor de caudal calibrado correctamente puede ayudar a remediar este problema.

En casos de incendio, inundación, terremoto y otros desastres, una NOMV puede proporcionar una protección esencial. En caso de un corte de energía, la NOMV permanecerá cerrada y aislará la línea principal del suministro de agua. Esto es crucial para proteger el valioso recurso del agua durante emergencias, y se previenen inundaciones catastróficas en la instalación si las tuberías se dañan.

También puede ayudar a proteger el sistema de riego durante la puesta en marcha de los servicios públicos —que previamente estaban cerrados— si la línea principal de suministro está altamente contaminada con residuos. Esto permite que los residuos se purguen del sistema antes de abrir las líneas de riego. En base a estos hechos, es fácil ver por qué el aislamiento de la línea principal de riego mediante una válvula maestra es una práctica de riego inteligente.

Saber más